Fuente: Facebook |
Y pensar que Santa Cruz de la Sierra, la ciudad más poblada de Bolivia, presume de ser la más avanzada, cosmopolita y civilizada. La locomotora que tira de la economía del país, al ritmo de un empresariado pujante y dinámico, vinculado principalmente a la ganadería y la agroindustria. La Miami nacional, la estrella del oriente boliviano: rumbosa, despreocupada, cálida, espectacular, acogedora, despilfarradora, en fin. Cuna de las mujeres más hermosas y pionera de la industria del modelaje, entre otras cosas. Ah, ese “otro país” que, admirados por su nivel industrial, sus amplias avenidas y paseos, sus enormes supermercados, sus lujosas urbanizaciones y demás, remarcan muchos viajeros del resto de la república que ponen sus pies por primera vez, como quien descubre el paraíso terrenal.
Esa Santa Cruz que en
las últimas décadas se ha convertido, por derecho propio, en un oasis de la
cultura por sus permanentes ciclos de cine, teatro, música barroca y
renacentista, además de exposiciones pictóricas y, por supuesto, una importante
movida literaria que marca el quehacer nacional; sin embargo, a pesar de ese
liderazgo, posee el bochornoso honor de tener el alcalde más cavernícola del
país y quizá del continente. Una joya digna de engrosar el bestiario universal
de la infamia.
Hace una semana, el
burgomaestre (será más bien burdomaestre) Percy Fernández, un ágil casquivano
de 75 años, se vio nuevamente envuelto en un escándalo al tocar el muslo de una
joven periodista en un acto público, aprovechando que lo entrevistaba sentada a
su lado. A pesar de los intentos de la mujer por apartar la mano del alcalde,
este reacciona casi susurrándole, llamándole “tacaña” por no acceder a sus
intenciones. El incidente volvió a
agitar el debate sobre los permanentes episodios de violencia contra la mujer
que sacuden a nuestra sociedad. Lamentablemente sólo en las redes sociales y en
algunos grupos feministas se dieron muestras de repudio y condena. El resto de
la población parece que asiste complacido al vergonzante circo que significa el
comportamiento aberrante de este y otros individuos repugnantes de la arena
política.
Lejos de manifestar un
creíble arrepentimiento o algo parecido, Fernández mandó una carta de disculpas
a la afectada donde le dice "no fue mi intención
ofenderla, ni lo he hecho" (¿¿??); declarándose además, en el mismo documento, como víctima de una
campaña mediática en su contra, de personas y medios interesados, en “una maniobra del más bajo nivel
político”. ¡Qué tal, eh!...Por si fuera poco, un grupo de choque movilizado por
el entorno del alcalde intentó agredir a una diputada que acudió a las oficinas
del ministerio público para presentar una demanda judicial al respecto. Varios
integrantes de ese grupo eran mujeres que vociferaban a voz en cuello
improperios contra la diputada.
Quizá alguien podría
sentir pena o conmiseración por este vulgar septuagenario, como he leído
comentarios del tipo “puede que esté enfermo de la cabeza, habría que mandarlo
al siquiatra o internarlo” o “es un viejo chocho, tiene sus locuras pero hace
obras, por el bien de Santa Cruz”. Tal vez eso explica que, por muy extraño que
parezca, siga muy vivito y coleando en su puesto, desempeñando orgullosamente
su quinta gestión como “honorable alcalde”, tal cual rezará en una plaqueta de
su despacho. Tal parece que a la gente le importa más que le asfalten la calle
y le construyan alcantarillas, como queriendo trastocar aquel célebre
justificativo de “roba pero hace” por uno nuevo, aunque suene nauseabundo, de
“soba pero hace”. Si una sociedad tiene un gobernante abyecto, es porque intrínsecamente
esa sociedad es abyecta, o por lo menos una gran parte. Suena inverosímil
que mujeres (la mitad del electorado) hayan votado por él, a pesar de sus
constantes muestras de corte machista a lo largo de su trayectoria política,
aparte de sus innumerables agresiones verbales a la prensa, indignas para una
autoridad de alto nivel. Luego me dirán por qué el Comité Cívico Femenino de
Santa Cruz (conformado por damas de la burguesía), amén de otros colectivos
como la brigada femenina de congresistas, no se han pronunciado al respecto. Y
eso que no es la primera vez.
Ya en agosto de 2010,
Fernández, besuqueó contra su voluntad a una trabajadora de obras públicas en
una inspección de un viaducto, ante la mirada sonriente y pasiva de muchos
varones que parecían celebrar las “gracias” del alcalde bonachón, como si fuera
el arquetipo del camba (nombre coloquial del cruceño) viril, “atrevido” y
“alzao”. Todo un machote que hace sonrojar a las mujeres, el macho alfa de la
manada marcando territorio. En marzo de 2012, volvió a protagonizar otro
incidente al manosear las nalgas de la presidenta del Concejo Municipal en un
coliseo. En otra ocasión se le ve extendiendo la mano al trasero de otra
empleada municipal mientras esta se revuelve asqueada. Cuatro actos de agresión
sexual que hasta ahora permanecen impunes sin que nadie le siente la mano a
este libidinoso carcamal que hasta tiene el desparpajo de seguir sonriendo como
si nada. Tan ancho y complacido como su cara abotagada.
Meme de internet |
Consciente de su poder omnímodo sobre cualquier mujer en
situación de dependencia laboral, hace realidad aquella máxima evista de “le
meto nomás (la mano) por más que sea ilegal” (de hecho, el gobierno masista ha
promulgado recientemente con bombos y platillos la Ley Integral contra la Violencia a la Mujer, que tipifica la acción
del alcalde como “delito de acoso sexual, con el agravante de que es un
servidor público”; puro papel mojado, nada más). No debería extrañarnos de un
individuo procaz que se sometió con gusto al régimen oficialista, a pesar de
ser nominalmente opositor, como en años anteriores se rebajó rastreramente ante
el presidente Sánchez de Lozada, poniéndose de rodillas y besándole la mano,
literalmente. Hoy por poco hace lo mismo ante Evo Morales, aunque figuradamente
ya lo ha hecho, aliándose con él con tal de seguir disfrutando de su posición
privilegiada. A tal punto es su amistad y connivencia, que siempre se los ve
muy satisfechos y relajados entre sí. Entre elogios mutuos y demás afectos públicos,
el presidente le llamó “el mejor alcalde de Bolivia”. Tal para cual.
Como era de esperar, ninguna de las ministras
y congresistas del partido gobernante salió a indignarse ante este nuevo acto
inmoral. Como sí hicieron en agosto de 2012 (foto inferior) cuando en tropel y
más rabiosas que fieras heridas condenaron al empresario y líder opositor Samuel
Doria Medina, acusándole de machismo, racismo, y otros adjetivos contra la
dignidad de las mujeres, por el hecho de que este había lanzado el bombazo de
que Evo Morales habría embarazado a la hija menor de edad de una de sus ministras.
"Estamos aquí
para decirle de frente a un hombre que cree que los millones están por encima
de la dignidad de las mujeres, que no nos vamos a quedar calladas”, comunicaron
en aquella conferencia de prensa. Hoy, todas estas ilustres defensoras de la
Mujer permanecen más calladas que la estatua de Adela Zamudio.Ministras y otras funcionarias (meme de internet) |
-----------------
P.S.
He aquí la imágenes de sus “galanterías, gracias, bromas opas, o excentricidades”, como denominan algunos.
Juzguen por sí mismos:
- Beso descarado y abusivo a una empleada de obras públicas.
- Nalgueada a la presidenta del Concejo Municipal
- Alargandola mano al trasero de una empleada municipal
- Acariciando el muslo de una periodista
- Bonus: Compilado de las sandeces que dispara a la prensa.
Este personaje es único, creo yo. No he visto algo parecido. Como tú sugieres, la sociedad que lo permite comparte la responsabilidad. Todas esas mujeres (y hombres) que saben lo repugnante que es todo eso y no dicen nada, para protegerse... En realidad, esas mismas mujeres y hombres también callan ante otras cochinadas del poder, en Bolivia y otros países, y nadie dice nada. Ante esto de los manoseos en público a mujeres que deben contenerse nos escandalizamos porque es grotesco, de lo más grotesco que hayamos visto, pero al mismo tiempo tiene un toque de...no sé, de Sancho Panza en su ínsula de Barataria. En fin...
ResponderEliminarEn un periódico español le llaman el “Gil y Gil boliviano” aunque no profundizan en los motivos de la comparación, imagino que será porque este también era alcalde, de Marbella, si mal no recuerdo; pero no conozco mucho de la trayectoria política de don Jesús, salvo por el manejo dictatorial un tanto grotesco que tenia del Atleti, ¿no?...Comparto, hay algo de sanchesco en nuestro personaje, pero en el sentido contrario al de su ínsula Barataria, donde lejos de mostrarse juicioso y prudente como Sancho, la emprende con toda torpeza, metiendo mano y lanzando carajazos a medio mundo. Lo que daría porque lo sacaran de su despacho en un borrico, tal cual amenazan alguna vez los sectores sociales contra algún concejal o político que no es de su agrado o que no cumple sus exigencias.
EliminarApreciado José : a propósito de la fotografía que encabeza el texto, alguna vez leí el siguiente diálogo en un artículo construido sobre dos personajes imaginarios:
ResponderEliminar- El poder es el poder de matar.
- Muy cierto...pero también es el poder de meter.
Ignoro si las mujeres de la foto también lo leyeron- en internet esas cosas son cada vez más factibles- pero en esencia esa idea resume lo que ha sido ley desde el comienzo de los tiempos: que el poder lo permite todo, hasta las más insospechadas infamias. De allí el curioso papel jugado en la historia por buena parte de los subversivos, disidentes, herejes y apóstatas : al derrocar un tirano, acaban ellos a su vez convertidos en otro acaso peor.
No sé, lo que usted apunta es terriblemente sugestivo, amigo Gustavo. Yo interpreto que los criminales (mucho más los que están en el poder) sienten esa fascinación de matar como si vivieran una experiencia similar al orgasmo. De hecho, creo que lo escuché en alguna serie policial de la tv, no estoy seguro. Y es una verdad de Perogrullo que los jefes mafiosos, dictadores y otros autócratas se rodeen de mujeres bellas para seguir ejerciendo el poder…de meter, claro. Sobre lo segundo concuerdo totalmente, a veces es peor el remedio que la enfermedad, como dice el refranero.
EliminarYa yo le hice tb un homenaje a éste camba primate hijoeputa, acopié casi casi los mismos videos. Yo no me explico a qué se debe tanta tolerancia con las asnadas d este otro coplero inmundo. Nadie le ha estampado su merecida patada en el culo a este (bien dicho) 'berlusconi local" Pero más me enfada la actitud d las "nalgueadas y manoseadas" pirujas.. D la concejal ya bien sabemos q es confirmada odalisca del casanova vejete (analfabeta y truchadora d títulos, pues d alguna manera y por alguna "vía" tenía q lograrse el carguito!!), pero d las otras.. yo no sé q pasa con nuestra gente, José, pero coincido cntigo: "somos intrinsecamente abyectos". Parece q tras centurias d incas y maleantes españoles, a nuestros genes bolivianos (en su mayoría) les fascina ser humillados y serviles. Ninguna d esas urracas ultrajadas reaccionó como debía: por lo menos un sonorísimo sopapo o una patada en los dindirindongos (Paulovich dixit) Y eso, es simple y llanamente digno d verguenza ajena. D q se queja ahora la fulana periodista de la red uno?? Si cualquiera diria q la muy piruja disfrutaba del jueguito!! Y así, sin mas, se quedó bien sentadita toda sonrisitas al lado del alcalde pulpito.. Ja! si eso no es falsa mojigatería, q resucite mi abuela.
ResponderEliminarCada persona, donde sea y d quien sea, recibe el trato q ella misma permite. Ni mas ni menos. Y estas cambas al parecer ya han entregado gozosas el asterisco al verde vejete. Y d sus maridos o novios o hermanos, ni hablar.. Puros maricas q tb (intrinsecamente) gustan d la humillada pública.
La solución es simple: Unos 9mm d cordura y buenos modales en la cabezota d un puerco semejante, bastan siempre pa frenar toda ésta inmundicia y, debo decirlo, parar el festejo de tanto alcahueterío generalizado, pero especialmente "camba".
"Soba pero hace".. esa estuvo fantástica, José. Abrazos.
Ah! olvidé aclarar q mi homenaje er por el feisbuk nomás.. pero Hyde tiene uno ya, y dice así: "Posterior a la ronda d mandingos q honraron a Melissa, y posterior tb a la metódica y lenta empalada orto-estática, reposar generosos 9mm a quemarropa en el occipucio del inmundo vejete hasta ver florecer la materia blanca jaspeada con leves toques d una muy probable ausente escala d grises.. Finalmente, diviértase pincelando un fino lienzo con esa mierdosa y sucia pasta, logrando así, inauditos crisantemos, claveles, sumisos coliflores, peluchines genuflexos y suaves culos d blandas y orientales pirujas; luego acabe su obra. Título sugerido: "Naturaleza (camba) muerta" Hyde se ocupará, artísticamente, d los restantes desperdicios.
ResponderEliminarSaludos.
Ja, como siempre Mr. Hyde ejerciendo de feroz justiciero. Lo que planteas es la pregunta del millón, pero no es tan sencilla la salida, tiene sus matices, tentado estuve de escribir algo sobre el hecho de que ninguna de las agredidas hay reaccionado debidamente, pero vayamos por partes: sobre la presidenta del Concejo municipal, estoy de acuerdo contigo, da la impresión de que ella consentía las caricias del vejete, además como luego no dijo nada, se puede extraer que le valió un comino su dignidad con tal de seguir conservando su cargo y, me imagino, su título de “presidenta”, los favores políticos se pagan, diría alguien. Sobre la pobre chica de obras públicas besuqueada, seguramente es de origen humilde y que depende de su sueldo. Por sobrevivencia laboral se habrá aguantado la humillación, de lo contrario la hubieran despedido al rato, ¿o no te acuerdas de la empleada de limpieza violada en Sucre por el asambleísta (que, por cierto, está a punto de salir libre menos de un año después)?¿ a quién despidieron? . Sucede lo mismo para la periodista, habrás visto su entrevista con CNN, donde se queja de que no sirve de nada interponer una denuncia, porque además de perder el puesto se habría arriesgado a que le enjuicien a ella, según sus palabras, además de la humillación y escarnio público, que significa para las mujeres este tipo de casos, no nos engañemos. Como sociedad machista que somos lo primero que hacemos es estigmatizar a la víctima: “si se deja tocar será por algo” ¿acaso no oímos todo el tiempo, aun viniendo de otras mujeres, paradójicamente? El problema está en las mismas raíces de la sociedad, en las taras de esa herencia hispano- indígena, que tú bien remarcas. Falta mucha educación, formación moral y cívica. Pero como estamos gobernados por los mejores ejemplares de la inmoralidad, mucho me temo que arrastraremos esta lacra por los siglos de los siglos. No hay esperanza en el futuro. Da asco este país.
EliminarPs. ja, cuando se desata ese Hyde,(parrafada FB) es terrible como trabaja su febril imaginación, escritura algo barroca pero deliciosamente perturbadora. Evocar esa “naturaleza muerta”, me hizo pensar inmediatamente en el Dr. Kevorkian y su hobby por el arte macabro, ¿no será discípulo suyo, Hyde?. Abrazos.
Muy coherente tu respuesta a la pregunta millonaria, José, claro q hay (lamentablemente) matices en todo, y el miedo.. (como dijo bien Doña Domitila Chungara justo antes d aguarle la fiesta al petiso Banzer) es el más fétido d todos. Vivimos cn miedo a las represalias del poderoso, lo q es en los hechos, una condición d viles, por condicionados y bien amaestrados, esclavos. Anteponer un trabajo miserable a la dignidad quizá tenga sentido en las cabecitas d esas "hoy dolidas" mujeres, pero insisto: (no vi la d CNN) quejarse dias despues d quedarse sentadita y pura sonrisitas junto a la escoria, es simplemente hipócrita. La tipa bien pudo retirarse del lugar cn dignidad o bien plantarle un sopapo. Ahora, si hablamos d humillación y escarnio publico, debieras ver las cuentas facebook d la (evidentemente hueca) fulana y su idiota marido, hacen allí tanta alharaca "dolida" con el asunto, q todo invita a pensar q hasta internamente disfrutan del momento d "fama". Pura hipocresía. Nada puede justificar un atropello semejante, el asqueroso individuo es reincidente. Por q? Porq se lo permiten. Hace unos años una simplona psicologa m preguntaba durante una entrevista d trabajo"Cuando se enoja y discute q palabras usa? Depende d la situación, le dije en principio. A su borrega insistencia finalmente le devolví su pregunta: "A ver, tú, si un desconocido te metería la mano en el culo o en las tetas, o lo hiciera con tu hija, qué palabras utilizarías? La tipa obviamente no dijo nada y me salió cn q yo era el entrevistado. Sumisos, se puede inferir, eso quieren expresamente tb todos los contratantes como empleados!! No te suena coherente cn lo q vemos??
ResponderEliminarEs q nos siembran nabos en el lomo y ya ni decimos nada, José.. Y eso d vivir aferrado a un temor d q nos echen de un laburo mínimamente "digno", aterra. No quisiera tener yo una mujer o novia o hija q acepte sumisamente a q le soben el culo solo por guardar su trabajito. Nah.. yo paso.
Abrazo.
Y juas! ya me falla la memoria..los años! Olvidé lo d kevorkian, ese es otro prodigio q vivió en tiempo inmerecido. Claro q lo conocemos, y lo respetamos. La eutanasia debiera ser un derecho como cualquier otro fundamental. Uno debiera poder morirse cuando quisiera y como quisiera sin tener q pedir permiso a nadie. Bah! si vieras cómo enseñan mis idiotas colegas la materia d bioética en las universidades. Lavan cerebros pero d una manera indigna, repitiendo cual loros todo aquello q otros sesudos lanzan como verdades absolutas. Mucho pa contar del asunto..
ResponderEliminarAbrazos, estimado amigo.
Juas, yo me refería más que todo a la afición del Dr Muerte por pintar cuadros macabros en sus ratos libres: cabezas cortadas, espadas sangrientas, etc., que hablan mucho de su controvertida personalidad. En cualquier caso, sus creaciones son de pésimo gusto. Con el asunto de la eutanasia estoy de acuerdo pero siempre y cuando se sigan parámetros estrictos y normados. Pero al dr Kevokian parece que se fue la mano con muchos casos, actuando a solo pedido de los pacientes y sin comprobar a fondo sus historias clínicas. Me parece bien que algún enfermo incurable solicite la eutanasia para ahorrarle sufrimiento. En el resto de los casos no, mucho menos por alguna depresión, transtorno psicologico o algo parecido. Abrazos.
Eliminar