10 marzo, 2012

5 Ablandados por la corrección política


¿Qué está pasando con el mundo?, cada vez más blando, más hipócrita, más higiénico mentalmente hablando; cada vez más preocupado de las formas que de la esencia. Inmersos como estamos en discusiones  absurdas, perdiendo el tiempo inútilmente en rebuscar las palabras para dorar los calificativos o ablandar los adjetivos. Como si eso, fuera a cambiar de la noche a la mañana, los prejuicios que tenemos sobre determinadas cosas o sobre la gente. Pensar que a punta de decretos y prohibiciones vamos a cambiar las ideas preconcebidas es un contrasentido porque,  no hace más que alentar la rebeldía, reforzando el efecto contrario.
¿Han notado? que,  a comienzos de este siglo, ya casi nadie emplea una palabra o frase soez en una canción, porque corre el riesgo de ofender a medio mundo, y ser blanco de activistas y de guardianes de las buenas costumbres. Imagínense al grupo femenino Vulpess, de la edad dorada del pop español (años 80),  cantando de nuevo “Me gusta ser tu zorra”; los palos que le caerían por parte de grupos feministas y otros sectores, independientemente de que si la canción es musicalmente aborrecible.  Menos mal que la literatura es todavía un territorio libre, ¿o no?
Así estamos, en todas partes se rasgan el vestido pero con distintos matices. En Francia por ejemplo, actualmente se plantea dejar de usar en los documentos oficiales la palabra “mademoiselle”, porque según algunos activistas tiene una connotancia sexista.   Al contrario, a este otro lado del charco, algunas féminas se enfadan si se les da el trato de “señoras” en vez de “señoritas”, ¿le parece que tengo cara de vieja? me han dicho alguna vez. Si hasta alguna mujer mayor lleva con orgullo el título de señorita, como indicativo de su estado civil.
En Bolivia, ya nadie osa decir “indio” o “chola” a secas, en público, porque automáticamente se asume como racismo. En ese afán de descolonizaje, la prensa se cuida de dar el ejemplo: “indígena originario” y “mujer de pollera” son términos de obligatoria referencia o nos puede caer encima la Ley contra el Racismo y la Discriminación. Curiosamente, el presidente Chávez, ha llamado en numerosas ocasiones en sus peroratas televisivas,  refiriéndose a Evo Morales como “el indio”, con cierto aire paternalista además. Y nadie pega el grito al cielo. Alguna vez, viendo documentales sobre voluntarios alemanes en Bolivia he escuchado claramente “der indios”, por supuesto sin afán menospreciativo, pero si un periodista o personaje local hace lo mismo, puede acarrearse un linchamiento mediático e ir a juicio,  independientemente del contexto. Sólo un ingenuo se creería aquello de que un racista deja de ser racista por verse obligado a usar eufemismos.
Es llamativo también que en Inglaterra, ya no se pueda decir simplemente “negro” -ni en castellano-, porque según la ejemplar sociedad inglesa es ofensivo, irónico si consideramos que el imperio británico fue el más esclavista del mundo, y hasta mediados del siglo veinte,  seguía tratando a los africanos como seres inferiores. Es ilustrativo el caso de una película, donde se mostraba a niños caminando detrás de soldados negros norteamericanos destinados a las islas británicas durante la Segunda Guerra Mundial, para comprobar si tenían cola. Actualmente,  pretenden dar lecciones de moral al resto del mundo con el caso de los futbolistas Suárez/Evra, un poco más y nos etiquetan a todos los sudamericanos como racistas, como si nosotros no conviviéramos con la gente de origen africano desde mucho antes. ¿Acaso no corría sangre africana  por las venas de Obdulio Varela, el gran capitán de aquella gesta conocida como Maracanazo?
El mundo a cada paso, lo quieren convertir en una sociedad aséptica, con la mojigatería como norma, la tibieza gobernando nuestras vidas, cuidándonos de no ofender a tod@s aquell@s –vaya forma de joder el lenguaje-que confunden género con sexismo en las normas de nuestro riquísimo idioma y que ven penes en todo objeto puntiagudo. Cada vez más amordazados, sin posibilidad de decir “esto es una mierda” acerca de aquello que no nos gusta y sonreír a medio mundo para no pecar de antipáticos. Cómo estamos, que hace poco una feminista se molestó porque un programa de televisión le obsequió un ramo de flores, como si estuvieran faltando a su integridad como mujer. El día que una chica me haga lo mismo,  diré lo que Tonino Carotone dijo, en una desgarradora canción con aire popular mexicano. Nunca sonó mejor una palabra malsonante, en mi opinión. Y si no,  ¿a quién carajos le importa?
Por qué voy a creer yo en el amor
si no me entiende, no me comprenden tal como soy yo
Por qué voy a creer yo en el amor
si me traiciona y me abandona cuando mejor estoy
No sabemos muy bien entre tú y yo
y aunque parezca no tienes la culpa, la culpa es del amor
Yo no quiero sufrir pero aquí estoy
y estoy sufriendo y no me arrepiento
me cago en el amor, me cago en el amor.

5 comentarios :

  1. Esta vez disiento de ti en un par de cositas mi querido José. Te recuerdo los excesos del rap, que por la fractura social en Estados Unidos tiene piedra libre (bueno, casi casi) para las cosas más ofensivas. Tenemos estos inolvidables versos de Big L, “This kid that owed me dough, I didn't take his life,/ Instead I tied him up and made him watch me rape his wife”, que cuenta de un pasador de droga que para cobrarse una deuda no mató a su víctima, solo la maniató y la forzó a presenciar cómo violaba a su mujer. O ese verso tan bonito, “You homo niggas getting AIDS in the ass,” que es de lo mas soez que se ha cantado en la historia de la música. En esto de los prejuicios y de la corrección política a veces se tiene que llegar a un compromiso, parece ser la lección del rap. En cuanto a lo de “negro” en el caso de Suárez/Evra lo que ocurrió es que el testimonio de uno fue más consistente que el del otro: le creyeron al francés y no al uruguayo, pero no porque Evra sea negro y Suárez uruguayo, sino porque se dio crédito a que Suárez no se limitó a decir “negro” con ánimo conciliatorio, como él dice, sino con espíritu ofensivo, y que su frase completa habría sido “yo con negros no hablo”. Pero es cierto que todo este asunto tiene un tufillo medio raro, y que Evra es un personaje de lo más controvertido que se le monta en la nariz a mucha gente. ¿Si pudo haber mentido? Claro que sí, pero le creyeron. Además, Suárez y el Liverpool no apelaron el fallo del tribunal ad hoc que juzgo el asunto.

    ResponderEliminar
  2. En realidad la corriente de la corrección política es tan antigua como la humanidad, amigo José. Solo que en algunos casos la llaman diplomacia. La treta consiste en cambiarles el nombre a las cosas y pasar de largo, haciendo creer que con el cambio de etiqueta desaparecen los problemas. Uno de los casos más aberrantes es ese de llamar " personas en situación de calle" a los mendigos. Ni siquiera los llaman homeless, como en el mundo anglosajón. Claro que nada supera al llamado lenguaje incluyente, surgido a la luz de las discusiones sobre equidad de género. Propongo escribir un poema en ese tono para que veamos hasta donde puede llegar el absurdo.

    ResponderEliminar
  3. Estimado Lalo, aprecio tu profundo conocimiento sobre el caso Suarez/Evra, aclarando mas cosas al respecto. Por supuesto que Suarez no es ningun santo, pero es que Evra tampoco es un tipo ejemplar, no agrada ni entre sus mismos compañeros de la selección gala. Lo que llama la atencion, es que la FA, emita veredicto basada solamente en la versión de una parte, que yo sepa en ninguna legislación existe eso.

    Sobre el asunto del rap, por razones esteticas, siempre lo evito, son demasiado vulgares sus letras. En lo que me cuestionas tienes toda la razon, la incorrecion politica no es sinonimo de libertinaje y vulgaridad. Tampoco se trata hacer apologia de la violencia contra la mujer, el consumo de drogas y otros crimenes. Lo soez, mientras sea bien empleado y con cuentagotas siempre es saludable en mi opinión.

    ResponderEliminar
  4. Ciertamente, estimado Gustavo, el famoso lenguaje incluyente lleva a situciones absurdas y redundantes en cualquier caso, como si el visibilizar obligatoriamente lo femenino en la escritura, visibilizara automaticamente a las mujeres. De que sirve toda esta parafernalia si persiste el machismo en la sociedad, vea el caso boliviano: un grupo de ¡madres! de un colegio, se opuso a que se inscribieran algunas chicas, todo por hacer respetar la tradicion centenaria de colegio de varones. Pero mejor vean esta joyita de lenguaje incluyente, que esta en la Constitucion venezolana.
    «Sólo los venezolanos y venezolanas por nacimiento y sin otra nacionalidad podrán ejercer los cargos de Presidente o Presidenta de la República, Vicepresidente Ejecutivo o Vicepresidenta Ejecutiva, Presidente o Presidenta y Vicepresidentes o Vicepresidentas de la Asamblea Nacional, magistrados o magistradas del Tribunal Supremo de Justicia, Presidente o Presidenta del Consejo Nacional Electoral, Procurador o Procuradora General de la República, Contralor o Contralora General de la República, Fiscal General de la República, Defensor o Defensora del Pueblo, Ministros o Ministras de los despachos relacionados con la seguridad de la Nación, finanzas, energía y minas, educación; Gobernadores o Gobernadoras y Alcaldes o Alcaldesas de los Estados y Municipios fronterizos y de aquellos contemplados en la Ley Orgánica de la Fuerza Armada Nacional.»

    ResponderEliminar
  5. Dejo en claro, Jose, que no apruebo los excesos del rap. Simplemente hago constar que es posible apartarse de la correccion politica, bajo el amparo de otro prejuicio de esa misma correccion politica. Grotesco, pero es lo que hay.

    ResponderEliminar

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...
 

El Perro Rojo Copyright © 2011 - |- Template created by O Pregador - |- Powered by Blogger Templates